La reaparición de Ernesto Zedillo como adversario de la 4T es un episodio más en la Disputa por la Nación entre dos propuestas: La de un orden mundial multilateral que respete la soberanía e identidad de los Estados Nacionales, y la de un régimen hegemónico unipolar que gobierne por encima de los Estados, operado por el gran capital
El ex presidente Zedillo hace un señalamiento según el cual, el gobierno de la Doctora Claudia Sheinbaum lleva a México a la “tiranía”. La Presidenta compara su propio gobierno con los efectos perniciosos del sistema neoliberal, y con el desempeño específico de Zedillo como Presidente, a lo cual este último revira alegando ser solo un “mensajero” y que la Presidenta debe limitarse a responder los cuestionamientos que él hace, lo que indica que Zedillo pretende fijar los límites del debate y que la Presidenta tiene que contestar como a él le parezca. Así de demócrata.
Los opositores dicen que es un abuso que Sheinbaum debata desde la Tribuna de Palacio Nacional sin embargo, como Presidenta está obligada a responder desde tal posición que le corresponde por mandato conferido en las urnas. Por su parte Zedillo opera a sus anchas con apoyo de la prensa nacional y de los EEUU, como luchador enmascarado del capital global desde su puesto en el Consejo de la transnacional Union Pacífic, dueña de la concesión del Transporte de Carga de Ferrocarril en México, otorgada por el propio Zedillo siendo Presidente. Menudo conflicto de intereses (1).
Es Zedillo quién pone a debate los dos modelos político económicos, porque su desempeño tanto en el Gobierno de Carlos Salinas de Gortari y después como Presidente, lo hace cofundador y protagonista esencial del régimen neoliberal y no simple ”mensajero” que esté libre de rendir cuentas. Con el pretexto de estabilizar la economía ambos ex presidentes tecnócratas mal vendieron 18 instituciones de la Banca Nacional y 902 empresas públicas entre ellas Teléfonos de México, Diesel Nacional, Altos Hornos de México, Televisión Azteca, Ferrocarriles Nacionales, etcétera, en un proceso plagado de corrupción que fue un saqueo brutal a la Nación.
Con el FOBAPROA Zedillo convirtió en deuda pública las deudas de los banqueros en quiebra, quienes tras el rescate se quedaron dueños de los bancos para después venderlos al extranjero, haciendo con ello un negocio de fábula que arrasó con la banca mexicana privada y por añadido, nos ha hecho pagar un billón 300 mil millones de pesos y nos falta pagar otro tanto, hasta el año 2060. Se entiende que Zedillo luche a favor de los Globalistas Internacionales en contra del Gobierno de México, pero es increíble que la oposición lo asuma como vocero, a riesgo de profundizar su propio desprestigio.
Lo anterior porque el mal gobierno de Zedillo detonó un trasiego paulatino de electores de clase media afectos al PRI y al PAN, que conforme fueron percibiendo los estragos del régimen neoliberal, con el tiempo se desplazaron a través del PRD o por otros caminos hacia lo que hoy es MORENA. Como botón de muestra de este fenómeno iniciado desde aquel entonces es El Barzón, organización de ciudadanos que en todo el país sostuvo una lucha jurídica y de movilización social en calles, carreteras y caminos rurales, para defender su patrimonio de la voracidad de los bancos y de los efectos nocivos del FOBAPROA (2).
(1) Si deseas más información sobre el activismo del ex presidente Ernesto Zedillo, te ofrezco en este mismo Blog Archivo Adjunto, mis siguientes artículos: Zedillo contra la 4T, Conflicto de Intereses y ¿Guardianes de la Democracia?.
MUY BUENA INFORMACIÓN
NOS PERMITE CONOCER ÑO ACTUAL