La amenaza de Donald Trump respecto a que en cuanto tome posesión como presidente de Estados Unidos, impondrá aranceles del 25% a los productos mexicanos es absurda y hasta suicida por lo que en consecuencia, lleva a pensar que es un pretexto para ir en busca de un objetivo diverso que mantiene oculto.
La amenaza invoca como pretexto la supuesta falta de cooperación de México en el tema migratorio y el tráfico de fentanilo, pero el constante flujo de armas hacia nuestro país y los nulos esfuerzos por frenar el consumo de drogas en los EEUU, genera la sospecha de que Trump tienen otros propósitos, como el de forzar a México a endurecer su postura frente al contrabando que viene de China. Así se advierte del sordo reclamo de Trump por la inclusión de componentes chinos en los vehículos que México exporta, que antecede al reciente exhorto hecho por la presidenta Claudia Sheinbaum a los empresarios para substituir importaciones que provienen del gigante asiático.
En tal contexto estalla la llamada Operación Limpieza que implica la incautación de mercancías chinas por cientos de millones de pesos, que el gobierno impulsa con acciones espectaculares encabezadas en forma personal por el propio Secretario de Economía Marcelo Ebrard. (1). Otra línea de sospecha apunta a que con su amenaza arancelaria, Trump intenta reactivar el tema del litio mexicano partiendo de que la industria automotriz es uno de los contenidos básicos del T-MEC, y que Elon Musk, aliado orgánico de Trump, es un factor clave en la fabricación de automóviles eléctricos que requieren baterías de litio.
Es pertinente recordar que el 27 de enero de 2022, López Obrador acusó a la Comisión Federal de Competencia COFECE de ser una entidad neoliberal que con la bandera de combatir los monopolios, entregó recursos nacionales en condiciones ruinosas para nuestro país entre ellas, el litio mexicano en favor de China. El ex Presidente envió al Congreso una iniciativa que en aquellos días nacionalizó el litio como mineral estratégico, con lo que China quedó fuera del juego y antes de concluir su mandato, AMLO inició otra reforma a raíz de la cual el Congreso extinguió a la COFECE y a otros organismos autónomos, acusados de operar al servicio de poderes fácticos.
En ese mismo orden de ideas, el 12 de septiembre de 2022 López Obrador y el Secretario de Estado de los EEUU Antony Blinken reunidos en Palacio Nacional, anunciaron con bombo y platillo “acciones conjuntas” para la explotación del litio mexicano a partir del llamado Plan Sonora y la creación de la empresa estatal Litio Mex (2). No hemos vuelto a saber de este tema ni de los acuerdos que pudieran haber generado las acciones conjuntas anunciadas, lo que quiere decir que las negociaciones sobre el particular están atoradas.
Esa falta de acuerdo en un negocio binacional que da para que ambas partes ganen, solo se explica porque mientras los EEUU mantienen su estilo de dominio en su relación con México, nuestro país procura la mayor integración económica posible en un marco de coordinación y respeto recíproco, preservando nuestra independencia frente al poderoso vecino. Los anteriores temas en los que México está en medio de la guerra comercial entre China y EEUU, pueden ser el gato encerrado que Trump mantiene oculto como verdadero objetivo, detrás de su absurda amenaza arancelaria.
0 comentarios